Escarfilado

Proceso del escarfilado

El escarfilado se realiza tras cortar la piedra por cualquier método, sobre todo por corte mecánico o natural empleando herramientas de labra natural, principalmente puntero, para conseguir un retrabajado de la superficie, en base a certeros golpes que van saltando lascas y esquirlas, ha este acabado se le denomina escarfilado. El escarfilado tiene otra variante cuando la superficie que se consigue tiene más relieve (unos 2 cm) se llama “de berrugo”. Se aplica a granitos de labra y piedras de cantería compactas, como las calizas, negro marquina, rojo alicante y crema marfil.

Aspecto proporcionado por el escarfilado

El escarfilado material así labrado tiene una apariencia natural y rústica con ciertas rugosidades, surcos y protuberancias que resaltan el relieve original al tiempo que se suavizan ángulos y salientes. El escarfilado dependiendo del grado de compacidad y cristalinidad de la roca el relieve conseguido podrá ser de superficies planas o curvas. El escarfilado Presenta una apariencia similar al partido o corte natural, si bien con mayor relieve. El escarfilado es un acabado muy apropiado para construcción rural, chimeneas o espacios urbanos.